La plataforma de contenido en línea y The Lede Company, la agencia de relaciones públicas de Gascón - la misma que representa a su compañera de reparto Zoe Saldaña - han dejado de conversar directamente con la actriz, según confirmaron fuentes a la revista especializada Variety.
Ambas organizaciones se comunican a través de su representante de United Talent Agency, Jeremy Barber, agregó Variety. Las fuentes también dijeron que ya no se le cubren los gastos de sus viajes a las distintas entregas de premios ni su estilismo para las apariciones en estos eventos, por lo que Gascón deberá costearse desde el tiquete de avión hasta su alojamiento en caso de participar actos de promoción de 'Emilia Pérez'.
Según informan medios especializados, las recientes polémica que han afectado a la actriz trans de 52 años, que empiezan desde calificar al islam de "infección" y de ser "profundamente repugnante", pasando por burlas a temas muy controvertidos como China, la muerte de George Floyd hasta los esfuerzos por impulsar la diversidad; han logrado que Netflix, quien espera que la academia le otorgue su primer Óscar a mejor película este año, decida jugar sus cartas de manera diferente, evitando que este traspíe interrumpa sus planes.
¿La respuesta de Gascón a la decisión de Netflix?
Gascón, que compite por la estatuilla a mejor intérprete femenina, aseguró este martes en un mensaje en Instagram que no tiene "nada que esconder" y que es víctima de la llamada "cultura de la cancelación".
En una entrevista a la CNN en español tras la polémica de los mensajes, Gascón pidió disculpas por sus tuits -la mayoría falsos, según dijo- y afirmó: "Se me ha juzgado, condenado, sacrificado y apedreado sin un juicio y sin derecho a defenderme".